22 Mar Almussafes sigue en la pelea con Vigo, Zaragoza y Cáceres por la primera gigafactoría de baterías
LEVANTE-EMV. El reciente anuncio del acuerdo entre el Gobierno, Iberdrola, el Grupo Volkswagen y Seat (que hoy presenta resultados económicos de 2020) para crear una planta de producción de baterías en España, ha levantado la veda del mercadeo político ante la poca concreción del ejecutivo sobre su ubicación final. Galicia, València, Extremadura y Aragón han entrado en una batalla política que va más allá de la viabilidad de los proyectos.
Por ahora parece claro que Martorell (Seat) no será el epicentro productivo de celdas para baterías, aunque la marca española sí dispondrá de una planta de ensamblaje en El Prat de Llobregat (donde actualmente ensamblan cambios y componentes electrónicos). La apuesta catalana por una gigafactoría se encuentra mezclada con argumentos políticos que van más encauzados a reindustrializar Zona Franca (terrenos de Nissan) que a emprender un gran proyecto.
La inversión necesaria para la construcción de una planta de baterías debe contar con los fondos económicos de la Unión Europea a través del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia. Esta inversión debe estar entre 2.000 y 3.000 millones de euros para arrancar un centro de producción de estas características, aunque para ello será necesario contar con unos volúmenes de producción de vehículos suficiente en plantas de fabricación de vehículos cercanas.
Luca de Meo, consejero delegado de Renault, estimaba en enero que para invertir en una planta energética el volumen de coches producidos con baterías debería situarse entre los 300.000 y 400.000 vehículos. Desde todas las autonomías se pelean por ese pedazo de pastel y, viendo los proyectos crece la teoría de que la zona que dispone de mejores argumentos para hacerse con la localización de la primera gigafactoría de producción de celdas de baterías de España es Zaragoza.
Está en el eje de carreteras y ferroviario entre Martorell (308 km) y Landaben (160 km), fábricas de Seat y de Volkswagen (en las que se producen los modelos del segmento B del Grupo Volkswagen Ibiza, A1 y Polo). También está en el eje que viene de Valencia (374 km), donde en Almussafes Ford fabrica híbridos y también ensambla las baterías. Se encuentra en el eje con Madrid (311 km), donde Citroën (Stellantis) produce el C4 eléctrico 100%.
En Vigo Stellantis fabrica eléctricos y ensambla baterías (que envían a Madrid,para el e-C4) y aunque es la planta que se encuentra más alejada siempre podría abastecerse desde un almacén central de baterías que Stellantis ubicaría en la planta de Villaverde. Por otro lado, el eje con la planta de Mercedes-Benz en Vitoria (290 kilómetros), donde hace el Vito eléctrico EQV, también es interesante para reforzar su candidatura. Extremadura, por ahora, solo puede aportar sus yacimientos de litio.
Siguiendo la pista lanzada por Wayne Griffiths al presentar el proyecto industrial de electrificación de Seat, la nueva fábrica de baterías debería prestar servicio «no solo al consorcio que formamos con el Grupo Volkswagen, sino que estaría abierta a todos los fabricantes» de vehículos. En este punto será crucial que otros grupos como Stellantis entren en el acuerdo para potenciar las posibilidades, y por ello la planta de Zaragoza (en la que se fabrica el Opel Corsa eléctrico) está en la mejor disposición. Con la entrada de Stellantis los volúmenes de producción de modelos que usaran esas baterías se unirían a las de Seat y Volkswagen, por lo que la rentabilidad de la futura planta estaría asegurada.
También puede entrar en el acuerdo de país Renault. Pese a que en un principio no estaría interesada en soportar la inversión de una planta de baterías, sí encajaría como socio para la producción de baterías más pequeñas. Renault fabrica modelos del segmento B, el mismo en el que se enmarcan los del grupo Volkswagen y Seat que se producen en España (sustitutos del Volkswagen Polo y del Seat Ibiza y Arona).
Visita a Renault
Mañana martes el rey Felipe VI y el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, visitarán la planta de Palencia de Renault donde contarán como anfitriones con Jean Dominique Senard, presidente del Grupo Renault, Luca de Meo, director general del Grupo Renault y José Vicente de los Mozos, director Industrial a nivel mundial.
Desde el Gobierno reconocen no saber dónde ubicarán esta primera gigafactoría de España, una de las seis que el Grupo Volkswagen anunció para Europa.
La C. Valenciana hará valer el peso de su fábrica de Ford
Desde Valencia empujan con fuerza para hacerse con el proyecto. La gigafactoría que promueve en Valencia Power Electronics supone una inversión de 2.000 millones de euros, la creación de 30.000 puestos de trabajo y un volumen de negocio anual de 2.500 millones de euros. La Generalitat Valenciana impulsó en 2019 un grupo de trabajo para armar un proyecto liderado por empresas locales. La gigafactoría (que incluye un centro de investigación) implicaría la creación de otros 30.000 puestos de trabajo. La multinacional valenciana, que tiene su sede principal y terrenos para crecer en Llíria, lidera el consorcio en el que se han integrado otras 22 empresas: Ford, Stadler, Iberdrola, Zeleros, UBE, CEV Technologies, Idom, Ampere Energy, Nutai, Astondoa, Grupo Segura, Endurance Motive, Fácil Solutions, Grupo Valautomoción, Grupo Gimeno, Inelcom Technology, Itera Mobility Engineering, Hess, Infamol, Mettecno, Torrecid y Witrac.