28 Ene La patronal augura que la economía valenciana crecerá por encima de la española
JORDI CUENCA | VALENCIA Encaminada hacia una senda ascendente, la economía valenciana va saliendo de forma «modesta pero cada vez más sólida» del agujero al que cayó hace más de siete años con el inicio de la crisis. El tramo final de 2014 así lo atestigua y durante 2015 «las tasas trimestrales de crecimiento avanzarán progresivamente y por encima de la media nacional», según el informe de coyuntura y perspectivas económicas hecho público ayer por la Confederación Empresarial Valenciana (CEV). La patronal provincial considera que en este nuevo año la generación de empleo neto se afianzará gracias a la mejoría de la demanda interna y el «impulso que nos seguirán aportando los bajos precios del petróleo junto a la devaluación del euro, la inyección de liquidez del BCE y los bajos tipos de interés».
Este vaticinio se produce después de que la CEV haya constatado que en el tercer trimestre de 2014 la economía valenciana mantuvo «a nivel agregado el ritmo de crecimiento mostrado en el trimestre anterior, con tasas moderadas pero definitivamente positivas», aunque también deja constancia en su informe de que los «altos niveles de desempleo y la todavía débil demanda interna a la que se enfrenta nuestro tejido empresarial, pese a continuar mejorando, limitan la percepción generalizada de que nuestra economía está consolidando la salida de la crisis». A diferencia de lo que ha sucedido en el conjunto de España, la patronal destaca que el dinamismo de las empresas valencianas en el exterior «sustentó gran parte de la actividad de nuestra economía». Por su parte, el principal componente de la demanda interna, el consumo de los hogares, «aceleró su mejoría, pero sigue lastrado por los altos niveles de paro, los menores niveles de renta disponible y las dificultades de acceso al crédito». La inversión privada perdió dinamismo, aunque se mantuvo en niveles positivos, mientras que la pública «continuó en niveles muy contractivos».
Por el lado de la oferta, el informe destaca el mejor comportamiento experimentado por las ramas de actividad y empresas más volcadas al exterior y a lograr incrementos de productividad. Por grandes sectores, el primario «mantiene en general un balance negativo» del que solo se salvan algunos cultivos como el caqui. La campaña citrícola «comenzó a complicarse en octubre y los efectos de la sequía han llevado al sector vinícola a la zona de pérdidas». Los efectos del veto ruso han afectado sobre todo a la cabaña porcina y en mucha menor medida a las frutas y hortalizas. Dentro del sector secundario, la industria manufacturera «ha experimentado un comportamiento menos dinámico de lo esperado», mientras que la construcción «continuó remontando su trayectoria de actividad», lo que se puso de manifiesto con el aumento de los visados hasta octubre en un 14,15 %, mientras que las licitaciones de obra pública «acumularon un paupérrimo crecimiento interanual del 0,15 %», muy lejos del 50,79 % de la tasa nacional. Por último, los servicios mantuvieron en el tercer trimestre el mayor dinamismo en la hostelería, el comercio y las actividades profesionales, científicas y técnicas.